Hace unos meses me enteré de esta gente que se hacen llamar gnósticos, y me metí en una lista de correo a ver si me hacía amigos. Hasta ahora lo mejor fueron unos poemas sobre el Espíritu, en verso libre, escritos por un tipo que firma otoniel rodriguez m y que ya me agradeció mis elogios. Soy su único aliado en la lista. Los demás están enfrascados en divagues cósmicos, charlas-debate que incluyen preguntas sobre el Ascenso al Todo y enormes dudas sobre el pecado de la masturbación. Es el derrame, eso los pone locos. Lo que está claro es que no tienen idea. Están desamparados, y aunque algunos lo disimulen, en el fondo tiene puesta una mochila de religión y Sabiduría que les parte la espalda. Está llena de piedras pero no saben a quién vendérselas. Y ahí andan, atravesando el desierto pagano de Internet. El Indio Solari les escribiría un himno, "a los desangelados".
Hoy alguien mandó este mensaje. Pega justo con lo anterior:
"subject: [gnosticos] son muchos
no puedo leer tantos mail podríamos ser mas explícitos"
Es el derrame, Bartleby, "¡es todo lo que hacemos por ti!".
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Ya me gasté como 10 pesos hoy en Internet+golosinas. Lo bueno es que usé como tres locutorios y voy dejando programada la dirección del blog como homepage. A ver si hacemos un público. Y yo sin trabajo, esperando mails con algún puto encargo. Fibertel viene el miércoles, en teoría, a cambiar el módem; aparentemente se quemó. El domingo tal vez sea fiscal en las elecciones porteñas. Idea de mi hermana y su entusiasmo por la militancia de base en agrupaciones de un peronismo no-alineado. Estaría bueno.
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En otra entrega mando algún verso de otoniel.
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