martes, marzo 20

Crónicas Universitarias

Hoy salimos a la cancha con una confianza desmedida. Yo tenía mi ponencia en la cabeza, bien dibujada pero apenas escrita en papeles que se hicieron humo, en seguida, con la primera o segunda frase. Era el seminario de Funes y la teoría literaria (circa Edad Media). Fue un blanco importante, prolongado. Silencio. Ángeles. Y yo miraba los apuntes y volvia a empezar, por el mismo lado, varias veces. Rumbo a la Nada, como Di Nucci.
El efecto blog: Demasiado canchereo con dos o tres ideas, ya no digamos "formuladas", pero con algún estilo, con un perfil de tésis, con aire a teoría experimental. Obvio: eran un buen post (y la peor ponencia).
Decí que jugaba con el hombre de las Identif. Imaginarias que tiró unos centros afiladísimos. Con eso rolingueé unas ideas como para el bondi, y cuando le tocó a él enfrió el tema y la definió con Jameson, fuerte, al medio. A esa altura yo ya estaba en la parada.
Fue como una comprobación empirica de la teoría de De Nápoli sobre los blogs. Si escribís sólo te perdés. No hay drama. No lo hay, a menos que pretendas dar una explicación sobre el tipo de lectura que hizo Dante Alighieri en una famosa epístola enviada al Cangrande della Scala, acerca de la reformulación tomista del alegorismo medieval, y cruzar eso con el concepto de "aura" de Walter Benjamin y con un gracioso artículo de Borges sobre el paso del tiempo y el destino de las ideas ("ayer eran el under, hoy son tan conocidas que nadie se da cuenta de que son su forma de ver el mundo"). No hay drama. Pero antes te conviene practicar con seres humanos.

2 comentarios:

F. dijo...

Exacto, Charly. Cuando te conocí en la mesa que expusimos, yo había leído tu trabajo y cerraba perfecto, redondo, pero te ponés muy nervioso al hablar frente a un coso lleno de gente. Probá de imaginártelos en bolas, o cogiendo, o en el baño... o todo eso junto. Pero no te imagines a vos mismo.
No es nada del otro mundo, es pánico escénico por ahí. Yo tenía y no tengo más. Bah, tengo, pero hago como si no.
Escribite el speech, hacé cuadro sinóptico, ensayá con tus amigos. No es such a big deal.

ánimo!

charly dijo...

ja, yo esa vez pensé que había dominado el arte del speech, detalles. Gracias por el dato y los consejos, vamos a seguir participando. El problema es el guionista, está claro. Más que pánico escénico es la puesta en palabras en sí misma, también me cuelgo sin público, la voy a practicar un poco más. saludo!